Pedro Andrés Mariqueo Martinez
Antecedentes del Caso
El 1º de mayo de l984, en los actos y manifestaciones alusivos al Día Internacional del Trabajo, murió Pedro Andrés MARIQUEO MARTINEZ, de 16 años de edad, estudiante de enseñanza media y militante de la Izquierda Cristiana (IC), quien se encontraba participando en una barricada-fogata en Américo Vespucio frente al pasaje Venezuela (Santiago), cuando llegó un furgón de Carabineros. La policía realizó disparos con armas de fuego. Una de las balas lo impactó en el pulmón, causándole la muerte al poco rato.
Por diversos antecedentes y testimonios verosímiles, a esta Comisión le asiste la convicción que los disparos fueron realizados por Carabineros; y, no obstante el carácter confuso de la situación, la Comisión presume que los agentes del Estado cometieron una violación a los derechos humanos al hacer un uso excesivo de la fuerza.
Fuente :Informe Rettig
Prensa
Muchas/os seguramente no conocen quien fue Pedro Mariqueo Martínez, era un niño-adolescente, tenía 16 años cuando fue asesinado por Carabineros de Chile un 1º de mayo de 1984 aproximadamente a las 22,30 hrs. mientras participaba en protestas en contra del dictador Augusto José Ramón Pinochet Ugarte en el sector de Lo Hermida comuna de Peñalolén, era militante de la Izquierda Cristiana de Chile. Tres balas cegaron su vida.
El martirio de Pedro nos mueve a hacer varias reflexiones a la luz del sentido de la Pascua de resurrección:
Para quienes somos cristianos la muerte entraña de alguna forma una contradicción, ya que tiene una doble dimensión, por una parte el dolor, el luto por la pérdida y la partida, la tristeza profunda por una vida que nos deja y, por la otra la fiesta, la alegría por la resurrección, la Pascua, el paso a la vida eterna.
Creemos que la Pascua de Resurrección, tiene un significado liberador y transformador ya que nos sacude de las tiranías, en la resurrección de Jesús está presente esa liberación del sometimiento que sufren las personas, tanto en el ámbito personal como en el contexto socioeconómico y político. Así se puede interpretar como un acto de Dios que rompe las cadenas de la injusticia y abre nuevas posibilidades de transformación y liberación para los oprimidos.
Representa la esperanza en medio del sufrimiento y la injusticia, en la resurrección de Jesús está la promesa de que, a pesar de las dificultades actuales, hay una esperanza de liberación y transformación tanto en el ámbito individual como en el colectivo.
Por esto, es que no podemos dejar de referirnos al martirio, ya que este es una realidad trascendente en la historia del cristianismo. Los mártires han dejado un legado de fe inquebrantable y valentía que sigue vivo en la Iglesia hasta el día de hoy. Su disposición para enfrentar la persecución y la muerte por el sentido y las consecuencias políticas de su fe en Jesucristo, es un testimonio poderoso del poder transformador del Evangelio en las sociedades y en las condiciones de vida de las personas y las comunidades.
El martirio de muchos/as de los/as luchadores contra la dictadura civil y militar chilena se convirtió en una representación de resistencia y esperanza. A pesar de las terribles condiciones y el peligro que enfrentaban, estos niños/niñas, hombres y mujeres continuaron oponiéndose al régimen del terror y alzando sus voces contra la represión y la violencia.
Ello significa o debe significar un compromiso con la justicia y solidaridad con los más pobres y oprimidos. Por lo que es un llamado a la acción, a comprometerse con la igualdad social, a superar el modelo que nos tiraniza con el consumo, la frivolidad, la competencia y el individualismo a luchar contra las estructuras de opresión y a construir un Chile, un mundo, más justo y solidario.
Por todo ello Pedro Mariqueo vive entre nosotros, ha muerto pero también ha resucitado, es un mártir de nuestro tiempo ya que pese a sus cortos años de vida representa un testimonio de sacrificio y compromiso inquebrantable hacia la causa de la libertad y la igualdad. Su sacrificio inspira y moviliza a otros, nos invita a aferrarnos a nuestras convicciones incluso frente a la persecución y la derrota. Impulsa a seguir, su nombre y su historia se convertirá en un símbolo que perdurará en la memoria colectiva.
Pedro, desde su cotidianeidad de opresión y carencias, desde su anonimato, desde su simpleza de niño, es un mártir de la Izquierda cristiana, que trasciende el tiempo y el espacio.
Los defensores de los derechos humanos, como él, son testigos del sufrimiento humano en todas sus formas. Ven y viven la desigualdad, la pobreza, la discriminación y la violencia que aflige a las comunidades marginadas. Se enfrentan cara a cara con el dolor y el sufrimiento, ellos mismos son víctimas de la opresión, y esto les impulsa a actuar. Nos ha dejado una huella imborrable en la historia y nos recuerda que la lucha por un mundo mejor requiere: unidad, perseverancia, humildad, verdad, coraje, reflexión, consecuencia y esperanza.
Pedro Mariqueo Martínez, un niño adolescente de Lo Hermida vivió su martirio y su pascua de resurrección y esta es un recordatorio que inexorablemente la vida vencerá.
Fernando Astudillo Becerra / Abogado
Fuente :reflexionyliberacion.cl 3/4/2024
Testimonios, fotografías, cartas, testimonios y otros documentos que familias, amigas y amigos entregaron o escribieron especialmente para ser publicados incorpora el libro “Rompiendo el silencio de niñas, niños y adolescentes ejecutados políticos durante la dictadura cívico-militar 1973-1990”, el que fue realizado por la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos (AFEP) con el apoyo del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, a través de la Unidad de Cultura, Memoria y Derechos Humanos, y a la Cátedra de Derechos Humanos de la Universidad de Chile.
La publicación basada principalmente en el Informe de la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación (1991) y el Informe de la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación (1996), busca reconstruir de forma integral y cuidada cada una de las vidas e historias de las víctimas.
Durante la investigación se accedió al archivo de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, donde se custodian documentos que las familias han preservado a través de años. También se incluyeron ilustraciones que estuvieron a cargo de Álvaro Gómez.
El proceso de creación fue un desafío complejo que implicó conjugar delicadeza, respeto y rigurosidad metodológica para enunciar en esta obra una verdad dolorosa e ineludible.
Fuente :cultura.gobierno.cl 20/4/2023
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