Berger Guralnik Carlos


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Fecha Detención : 11-09-1973
Lugar Detención : Chuquicamata

Fecha Asesinato : 19-10-1973
Lugar Asesinato : Calama


Edad : 30

Actividad Política : Partido Comunista (PC)
Actividad : Periodista

Estado Civil e Hijos : Casado
Nacionalidad : chilena


Relatos de Los Hechos

Fuente :(Rettig)

Categoría : Antecedentes del Caso

El 19 de octubre de 1973 fueron ejecutados por personal militar, en el camino entre Calama y Antofagasta, las siguientes 26 personas:

Carlos BERGER GURALNIK, de 30 años de edad, periodista y abogado, director de la Radio El Loa y jefe de Relaciones Públicas de Chuquicamata, militante comunista; detenido el 11 de septiembre en las dependencias de Radio Loa, sometido a Consejo de Guerra el 29 de Septiembre y condenado a 60 días de prisión. Al momento de su ejecución se encontraba cumpliendo su condena.

Los últimos diez mencionados prestaban servicios en la planta de Explosivos Dupont de empresa ENAEX y fueron detenidos en dependencias de la empresa el día 12 de octubre de l973 a mediodía, por personal de Carabineros, siendo llevados inmediatamente a la Comisaría ubicada en el sector de Dupont. El mismo día los detenidos fueron trasladados a la Comisaría de Calama, donde permanecieron en calidad de incomunicados alrededor de cinco días. Durante su detención en ese Recinto fueron llevados en diversas oportunidades a otros lugares para ser sometidos a interrogatorios y torturas. El día 17 de octubre fueron ingresados en la Cárcel Pública. No existen antecedentes precisos sobre los cargos que se les imputaban, como tampoco sobre su situación procesal a la época de sus ejecuciones.

El día 20 de octubre de 1973 se dio a conocer por medio de la prensa una información oficial emanada del Jefe de Plaza, que señalaba que 26 detenidos de la Cárcel de Calama habían sido muertos por el personal militar que les transportaba a la Cárcel de Antofagasta, cuando aquellos intentaron huir aprovechando un desperfecto eléctrico del vehículo en el que eran trasladados.

Idéntica versión se dio a los familiares directos de los ejecutados, a quienes además no se les hizo entrega de sus restos, sino solo de certificados de defunción que indicaban como lugar de la muerte, Calama, y como causa, fusilamiento. Respecto de los cuerpos, existió un compromiso de la autoridad militar de la época en orden a entregarlos al cabo de un año, compromiso que no obstante constar en documentos entregados a las familias, jamás se cumplió. A pesar de las sucesivas investigaciones para lograr dar con el paradero de los cuerpos, sólo durante 1990 se logró hallar el lugar en el que al menos durante un tiempo estuvieron ilegalmente inhumados y desde donde fueron retirados o explosionados en alguna ocasión. A pesar de ello, pudo identificarse pericialmente restos de Aroldo Cabrera.

En cuanto a los hechos que condujeron al fusilamiento de los 26 detenidos de Calama, la Comisión se formó convicción que todos ellos fueron ejecutados al margen de la ley, con crueldad y ensañamiento, hecho ilícito de responsabilidad de agentes del Estado. Se fundamenta tal convicción en las siguientes circunstancias :

– La versión de la autoridad en orden a que haya existido un traslado de los reos resulta inverosímil, sobretodo cuando se hallaba en el lugar una comitiva procedente de Santiago precisamente para revisar la situación procesal de los detenidos, sosteniéndose incluso, aunque ello no ha podido ser comprobado, que cuando los detenidos fueron sacados de la Cárcel se hallaba sesionando un Consejo de Guerra que les afectaba, lo que hace aún mas absurdo que estos fueran llevados hacia otro lugar. Tampoco tiene sentido el traslado si se considera que un significativo número de los detenidos tenía a esa fecha dictada sentencia condenatoria en su contra, otros estaban siendo procesados, otros debían ser relegados y algunos no tenían siquiera proceso iniciado, lo que contribuye a desvirtuar la existencia de algún motivo o razón que explique la necesidad de trasladar a todos ellos y en conjunto, a la ciudad de Antofagasta.
– Es improbable que haya existido un intento de fuga, entre otras cosas, por encontrarse entre los detenidos personas que estaban condenadas a penas relativamente muy bajas; por haber otros que estaban en precarias condiciones físicas producto de las torturas recibidas; y finalmente por la extrema dificultad de huir estando custodiados por un grueso destacamento militar;
– Aún más importante que lo anterior es que en las declaraciones públicas de las diversas autoridades y oficiales que tuvieron participación en los hechos, se ha discutido sobre quién dio la orden de proceder a las ejecuciones, sin aducir que se habría tratado en realidad de un intento de fuga, desmintiendo todos ellos la explicación inicial;
– Diversos testimonios confiables hacen concluir que en los fusilamientos participaron oficiales del Regimiento de Calama y de la comitiva venida desde Santiago;
– En relación a estos hechos no hubo investigación institucional que ordenaran las autoridades competentes para lograr el debido esclarecimiento de los hechos y delimitar las debidas responsabilidades, como era procedente. Asimismo, los procesos judiciales, que terminaron siendo de la competencia de la Justicia Militar, fueron sobreseídos por aplicación del Decreto Ley de Amnistía;
– El hecho que sus cuerpos no hayan sido entregados a sus familiares, hace presumir una afán de ocultar los sucesos.

 


SLM identifica restos óseos encontrados en Calama

Fuente :18 de Mayo 2003 La Nacion

Categoría : Prensa

Tras una serie de análisis, el Servicio Médico Legal logró identificar los restos óseos correspondientes al abogado y periodista Carlos Berger y del dirigente sindical Domingo Mamani López, ambos detenidos y hechos desaparecer en el marco de la llamada Caravana de la Muerte.

Las osamentas de los disidentes al régimen militar pudieron ser individualizadas tras ser sometidas a pruebas de ADN que fueron halladas en 1993, en una fosa a un costado del camino a San Pedro de Atacama. El hallazgo permitió identificar en 1995 a 13 de los 26 ejecutados el 18 de octubre de 1973.

Según informa El Mercurio en su edición de hoy, hace diez años las identificaciones se lograron con superposiciones fotográficas de los cráneos, por lo que no fue posible trabajar con los demás restos óseos debido a su pequeño tamaño.

Esas piezas fueron guardadas en el cementerio municipal de Calama hasta hace unos meses en que se comenzó a intentar nuevas identificaciones.

En el caso de Carlos Berger, el SML trabajó con un trozo del metatarso del pie izquierdo, cuyo ADN fue comparado con una muestra aportada por su hermano Ricardo, dando resultado positivo.

El pequeño fragmento de hueso fue destruido para realizar el peritaje. De los otros restos periciados, se obtuvo además un resultado positivo para identificar a Domingo Mamani.

No obstante estos avances, la identificación definitiva debe ser determinada por el Segundo Juzgado de Letras de Calama, trámite que se prevé se extenderá a lo menos unos dos meses más.

Desde Suiza, la viuda de Carlos Berger, la abogada Carmen Hertz, confirmó estos antecedentes y advirtió que la destrucción de los cadáveres se debió a la remoción de la fosa original donde fueron inhumados clandestinamente los ejecutados.

"Esto es una expresión más – dijo- de la política de exterminio que llevaron adelante el régimen militar y sus agentes, porque al asesinato se sumó el ocultamiento de los restos y a ello se sumó la remoción de los restos. El desaparecimiento sobre el desaparecimiento es una perversión brutal y una gran crueldad".

Además, advirtió que estas identificaciones revelan nuevos errores del informe de las FF.AA. a la mesa de diálogo, ya que su marido y Mamani figuran como lanzados al mar en Tocopilla.

Carlos Berger era director de la radio El Loa y jefe de relaciones públicas de Chuquicamata, cuando fue detenido el 11 de septiembre de 1973, junto a otros 25 opositores al régimen militar.

Entre ellos estaba el presidente del sindicato de la Empresa Nacional de Explosivos, Domingo Mamani López, 41 años, socialista, a quien se lo acusó de participar en sabotajes.

El 19 de octubre de 1973 todos ellos fueron ejecutados, pese a que un consejo de guerra los condenó a penas de presidio.

Estas ejecuciones y otras atribuidas a la comitiva encabezada por el general (r) Sergio Arellano Stark dieron origen al proceso que instruye el ministro Juan Guzmán y que motivó el desafuero, procesamiento y sobreseimiento del ex senador Augusto Pinochet.


La historia del ejecutado esposo de Carmen Hertz llegará al cine

Fuente :La Nación 27 de Julio 2007

Categoría : Prensa

“Vida con Carlos”, coproducción con España, recibió 60 mil dólares. “Es la historia de un hijo que busca la memoria de su padre”, cuenta Berger.

“Ilusiones ópticas”, de Cristián Jiménez y el documental “Vida con Carlos”, de Germán Berger, son los proyectos que se adjudicaron el fondo Ibermedia, mientras que en reserva para la segunda convocatoria quedaron los filmes “Tony Manero”, de Pablo Larraín y “La lección de pintura”, de Pablo Perelman.

“Vida con Carlos”, coproducción con España que recibió 60 mil dólares, es una película-documental que narra la historia de una familia que vive una tragedia y cómo se recompone después de lo acaecido. Berger, que es hijo de la abogada de derechos humanos Carmen Hertz, explica que “es la historia de un hijo que busca la memoria de su padre, pero la particularidad es que en este caso es la historia de mi propia familia, la historia de la búsqueda de mi padre, Carlos Berger, que es ejecutado político en 1973”, comenta el realizador, quien agrega que el filme está constituido de su archivo familiar desde la época del ’30, cuando llega su familia de Rusia y Hungría hasta archivos de “mi propia familia, de la hija que tuve”.


Identifican restos del esposo de Carmen Hertz y otras 5 víctimas de la Caravana de la Muerte

Fuente :Radio BioBio Viernes 31 enero 2014

Categoría : Prensa

El ministro en visita para causas de Derechos Humanos Leopoldo Llanos confirmó la identificación de los restos de seis de las víctimas del denominado “Caso Caravana de la Muerte-Episodio Calama”. Entre ellos, Carlos Berger, esposo de la abogada Carmen Hertz.

El ministro se reunió con los familiares de las víctimas para dar cuenta de los informes periciales remitidos por el Servicio Médico Legal, sobre las 26 personas ejecutadas por la dictadura en Calama, el 19 de octubre de 1973, cuyo proceso criminal lo investiga la ministra Patricia González.

Los resultados de los informes genéticos dieron cuenta que se logró identificar científicamente los restos de Carlos Alfredo Escobedo Caris, Hernán Elizardo Moreno Villarroel, Mario Arguellez Toro, Luis Alfonso Moreno Villarroel, Carlos Berger Guralnik y Jerónimo Carpanchai Choque.

Los restos de las personas asesinadas fueron encontrados en 1990, en una fosa ilegal al norte del kilómetro 16 y medio del camino a San Pedro de Atacama.

Las pericias iniciales establecieron que correspondían a sujetos diferentes, con una data de muerte anterior a 1975; y que, conforme a las estructuras óseas, eran odontológicamente mayores de 12 años.

En el proceso se indica que los restos permanecieron sepultados por más de 10 años, y que hubo exhumación de casi la totalidad de los restos, quedando en el lugar solo un escaso remanente de ellos.

Con estas nuevas diligencias exitosas, se llega a un total de 19 víctimas identificadas, de un total de 26 cuerpos encontrados.

Sobre las víctimas identificadas:

Carlos Alfredo Escobedo Caris: Militante socialista, de 24 años de edad al momento de su detención. Chofer de Chuquicamata. Fue detenido en su domicilio el día 24 de septiembre de 1973 y ejecutado el 19 de octubre del mismo año.

Luis Alfonso Moreno Villarroel: Militante socialista de 30 años de edad; obrero de Chuquicamata. Fue detenido el 12 de octubre de 1973, cuando se presentó voluntariamente a declarar al enterarse que existía una citación de la Fiscalía Militar en su contra, siendo ingresado a la Cárcel Pública de Calama, y ejecutado el 19 de octubre del mismo año.

Carlos Berger Guralnik: Periodista y abogado, de 30 años de edad. Era director de la Radio El Loa y jefe de Relaciones Públicas en Chuquicamata. Militante comunista. Fue detenido en las dependencias de la radio El Loa el día 11 de septiembre de 1973 y ejecutado el 19 de octubre del mismo año.

Mario Arguellez Toro: Dirigente socialista de 34 años de edad. Taxista. Fue detenido el 26 de septiembre de 1973 y condenado a prisión por Consejo de Guerra. Fue ejecutado el 19 de octubre del mismo año.

Hernán Elizardo Moreno Villarroel: Secretario de la Gobernación del Loa, militante socialista. 29 años de edad al momento de su detención. Estuvo bajo arresto domiciliario durante un mes, a partir del 12 de septiembre de 1973, y luego trasladado a la Cárcel de Calama. Fue ejecutado el 19 de octubre del mismo año.

Jerónimo Carpanchai Choque: Militante socialista de 28 años. Obrero de la Empresa Nacional de Explosivos (ENAEX). Fue detenido en dependencias de la empresa el 12 de octubre de 1973, siendo trasladado a la Comisaría de Calama y, cinco días después, a la Cárcel Pública. Fue ejecutado el 19 de octubre del mismo año.


Carmen Hertz tras condena a asesinos de su pareja: «Justicia tan tardía, es casi denegación de justicia»

Fuente :eldesconcierto.cl, 24 de Septiembre 2022

Categoría : Prensa

La parlamentaria del PC expresó sus descargos en redes sociales luego del fallo de la Corte Suprema que condenó a exagentes de la comitiva Caravana de la muerte por el asesinato de 26 prisioneros políticos en 1973, entre quienes se encontraba su esposo.

La abogada de Derechos Humanos y diputada del Partido Comunista, Carmen Hertz, publicó este viernes por la noche en su cuenta de Twitter su descargo por el tardío fallo de la Corte Suprema contra los exagentes del Ejército que asesinaron a su pareja, Carlos Berguer, en 1973.

«Finalmente después de 49 años de ejecutada la masacre de 26 prisioneros políticos, entre ellos mi esposo el abogado y periodista Carlos Berguer Guralnik, en Calama por la Caravana de la muerte, se dictó fallo definitivo de la Corte Suprema», escribió la parlamentaria para comenzar su hilo en redes sociales.

En este detalla que se condenó al general Pedro Espinoza Bravo y al coronel Juan Chiminelli Fullerton a presidio perpetuo en calidad de autores. «Únicos sobrevivientes de la comitiva criminal, los otros murieron en impunidad, entre ellos Arellano Stark«, denuncia Hertz.

Aparte de estos altos mandos, la justicia también falló en contra de los oficiales Carlos Langer, Hernán Nuñez y Víctor Santander, quienes fueron condenados 15 años y un día de presidio mayor por su participación en los hechos. Además, los pilotos del helicóptero puma que trasladó los exagentes hacia el lugar de la masacre, Emilio Mahotiere y Luis Felipe Polanco, recibieron una pena de 12 años de presidio mayor.

«Justicia tan tardía, es casi denegación de justicia», reflexionó la diputada Carmen Hertz en su último tuit, al que respondieron varios usuarios y compañeros de su partido, entre ellos el alcalde Daniel Jadue.


Carmen Hertz: "¡Esto es un fraude y no lo voy a aceptar!"

Fuente :No se conoce, si alguien lo sabe por favor avisenos

Categoría : Prensa

Esta abogada, viuda del periodista Carlos Berger -ejecutado por la "Caravana de la muerte"-, rechaza la información que a través de la mesa de diálogo se le entregó sobre su marido, informándole que habría sido lanzado al mar. Aquí cuenta su historia, que le produjo, según dice, un quiebre "irreparable y definitivo" en su vida.

Aunque el destino de los restos de su marido, Carlos Berger Guralnik, es una verdad que ha buscado desde hace 27 años, la reacción de Carmen Hertz ante el informe entregado por las Fuerzas Armadas fue categórica: "¡Esto es un fraude y no lo voy aceptar!". ¿Por qué adoptó esa actitud, mientras otras mujeres de la agrupación de familiares de detenidos desaparecidos aceptaron la información y la agradecieron? Porque ella considera sospechoso que una explicación "tan genérica, vaga e imposible de comprobar" -como que fueron lanzados al mar (sin ningún otro detalle)-, incluya muchos casos integrados en la "Caravana de la muerte", por los que hoy se está tratando de procesar al general Pinochet.

Como abogada querellante en ese proceso y víctima directa (su esposo, Carlos Berger, abogado y periodista, fue ejecutado el ‘73 y posteriormente sus restos desaparecieron), la abogada Carmen Hertz es una voz autorizada para hablar de los últimos y relevantes acontecimientos ocurridos en el ámbito de los derechos humanos, en el que es calificada por algunos como una de las "duras". Pero ella afirma que su actitud es sólo consecuente y dice que es eso lo que le ha dado en estos años paz e incluso alegría.

Independiente de izquierda, Carmen Hertz tiene hoy 53 años, una nueva pareja -Manuel Riesco- y un hijo de su matrimonio con Carlos Berger, Germán, de 28 años, periodista titulado de la Universidad Diego Portales y hoy estudiante de cine en Barcelona.

Carmen y Carlos se conocieron en la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile. El militaba en las Juventudes Comunistas desde los 15 años. Pertenecía a un mundo de intelectuales judíos de izquierda, con un perfil progresista. Ella, al revés, nació en un hogar de derecha, mucho más tradicional y conservador. Por eso, le resultaba cautivante el mundo que rodeaba a Carlos, la armonía familiar que reinaba en su casa y las inquietudes culturales que en ese hogar manifestaban todos.

A fines de julio de 1973, decidieron irse a vivir a Calama, una decisión que no fue fácil para ellos, fue más bien Carlos quien la tomó. En ese entonces, tenía 29 años, era director de la revista "Ramona", una publicación juvenil que había en esa época, y había sido jefe de gabinete de los ministros de Hacienda Orlando Millas y José Cademártori. Pero se entusiasmó con la idea de trabajar en un centro de producción y en Chuquicamata se necesitaba nombrar al director de comunicaciones del mineral que era, a su vez, director de la radio "El Loa", de propiedad de esa empresa. "El tenía muchas ganas", cuenta Carmen. "Estábamos en un momento crítico del gobierno de Salvador Allende, de gran acoso y de sabotajes a centros estratégicos como era los minerales de cobre. Para Carlos, trabajar ahí era un privilegio. Nunca midió ni el sacrificio ni las ulteriores consecuencias de irse a una ‘ratonera’, como era ese lugar, estando el país al borde de un golpe de Estado. Por eso pidió el cambio". Para Carmen, quien entonces tenía 26 años, no fue fácil, pues trabajaba en la Cora (Corporación de Reforma Agraria) y su hijo Germán tenía apenas 10 meses. Aunque su cuñado, Eduardo Berger, era médico del hospital de Chuquicamata, y David Silberman, gerente general de la empresa, era muy amigo de Carlos, ella no conocía a nadie. "Siempre me resultó un lugar muy desolado, muy feo, nunca me gustó", recuerda.

Carlos viajó al norte los primeros días de agosto y ella, el 15. No alcanzó a estar ni un mes allá antes de que se produjera el golpe de Estado. Recuerda que en la mañana del 11 de septiembre, su marido recibió un llamado del jefe militar que había asumido el control de Calama y del mineral, ordenándole clausurar las transmisiones de radio "El Loa". Berger reunió al personal, les pidió que se fueran y se quedó transmitiendo el mensaje de la CUT, llamando a los trabajadores a permanecer en sus puestos.

Tras ser detenido, fue conducido al regimiento de Calama, junto a otros funcionarios, dirigentes políticos y sindicales. Luego pasó a la cárcel pública de esa ciudad. Se convocó a un consejo de guerra el 20 de septiembre y la sentencia se notificó alrededor del 24: Berger fue condenado a 60 días de prisión. Carmen Hertz, quien también actuaba como abogada de su esposo, concurrió el 18 de octubre del 73 -un día antes de las ejecuciones de la "Caravana de la muerte"-, a hablar con el fiscal militar para pedirle que los cerca de 20 días que le quedaban por cumplir fueran sustituidos por una pena pecuniaria, porque los militares de la zona –a diferencia de otros consejos de guerra- aplicaron penas menos drásticas. El fiscal le dijo que accedía y le pidió que formalizara la petición. Al día siguiente, cuando ella llevaba su escrito, notó en la fiscalía un ambiente distinto, de gran nerviosismo. "El fiscal me dijo que no podía acceder a lo acordado el día anterior, pues había llegado un grupo de oficiales de Santiago al mando del general Sergio Arellano Stark. ¡Nunca me voy a olvidar! Era primera vez que oía ese nombre".

Ahí comenzó el peregrinaje de Carmen Hertz. Fue a la cárcel a informarle a su esposo. Cuando llegó, ya habían sacado a casi la mitad de los prisioneros. La tensión era indescriptible.

-¿Su marido intuía lo que le iba a pasar?

-En absoluto, pero estaba muy nervioso. Más bien pensaba que los iban a trasladar a Santiago. Después de eso, partí a Chuqui, a la casa de Eduardo, el hermano de Carlos, donde nos encontrábamos. A las 8 de la noche me llamaron por teléfono. Una voz anónima me dijo que Carlos había sido sacado de la cárcel y llevado a alguna parte. Nunca supe quién fue. Nosotros no podíamos bajar por el toque de queda y empezamos a llamar a la cárcel. El alcaide nos dijo que efectivamente había sido sacado, pero que no me preocupe, porque ya iba a volver. Era ya la una de la mañana y con Eduardo nos dimos cuenta de que había una situación muy rara, pero nunca pensamos en la posibilidad de la muerte. A la mañana siguiente, bajamos a primera hora y al llegar a la gobernación de Calama había un grupo de funcionarios en estado de shock. La abogada me abraza llorando y me dice: "Carmen, ¡los mataron a todos!". Así de brutal fue. Con mi cuñado nos negamos a que eso fuera verdad. Nos fuimos de inmediato al regimiento. Allí no nos quisieron recibir, nos dijeron que más tarde. Yo me aferraba a la idea de que tenían que estar vivos. No me moví, exigiendo hablar con el comandante, el coronel Rivera. El no me recibió. En el regimiento había conmoción. Los oficiales corrían de un lado a otro. En un momento, uno se acercó y nos informó oficialmente, papel en mano, que Carlos había sido trasladado en helicóptero a Santiago con un grupo de detenidos, para un nuevo consejo de guerra. Tanto me aferré a esa idea, que la di por real y sentí como un alivio. Llamé al padre de Carlos a Santiago para decirle que fuera a la Escuela Militar y empezara a recorrer los recintos de detención. Yo no sabía que Carlos ya estaba muerto desde el día anterior, a las 6 de la tarde. La noticia se la había confirmado poco antes a mi cuñado el director del hospital, pero él no me la había querido decir. Como el coronel no me recibía, fui y me senté en la cuneta, frente a su casa, a la hora del toque de queda. No pensaba moverme a menos que me dieran salvoconducto. Rivera finalmente nos recibió en la calle, me dijo que me fuera a la casa, que no tendría ningún problema en el trayecto y que esperara noticias. Tampoco se atrevió a decirme la verdad.

Eso es lo impactante.

-¿Qué objetivo tenía la versión del helicóptero hacia Santiago?

-Nunca pude explicarme por qué nos dieron esa versión tan formalmente. Deben haber ido inventando sobre la marcha. Ya Arellano se había ido, pero no hallaban qué decirnos. Probablemente trataban de dilatar el conocimiento de lo que había ocurrido. Finalmente, volvimos a Chuquicamata, y ahí llamaron por teléfono a mi cuñado para pedirle que saliera a la calle, sin mí… bien extraño. Salimos juntos. Nos encontramos con un jeep con dos oficiales y un capellán castrense. Ellos nos dijeron que los presos fueron trasladados a Antofagasta, que había habido una "sublevación" y habían sido "todos muertos".

Tras esa trágica noticia, consiguieron con el coronel Rivera un salvoconducto para regresar a Santiago a informarle a los padres de Carlos. Carmen y su cuñado partieron esa noche en auto a la capital. Manejaron más de 20 horas sin parar. Iban en estado de shock, aferrados a la idea de que no era verdad lo ocurrido, que algo iba a pasar que haría que eso se borrara. "Fue algo que no podría repetir…"

-¿Cuanto tiempo pasó hasta que salió de Chile?

-Salí en noviembre. Pasaron 20 días. Mi suegro insistía en que me fuera, pues creía que corría riesgos muy altos, sobre todo por haber sido secretaria del consejo de la Cora, y porque nuestra casa en Santiago había sido allanada y saqueda.

-¿Le atribuían más importancia política de la que tenía?

-Claro, es que Carlos había sido jefe de gabinete de Millas y Cademártori. Además, los allanamientos de domicilio surgían mucho por denuncias de vecinos y nosotros éramos abiertamente funcionarios de la Unidad Popular. A Carlos le llegaban cartas anónimas con frases como: "Yakarta se acerca", con la araña de "Patria y Libertad", cuyo líder era Pablo Rodríguez, hoy jefe de la defensa de Pinochet.

El exilio y la nostalgia

-Usted pasó su exilio en Buenos Aires, Caracas y París. Volvió el ‘77. ¿Por qué tan pronto, comparado con otros exiliados?

-Porque se me hacía muy duro estar sola con Germán afuera. La nostalgia era insoportable. Prefería enfrentar el Chile oscuro y amenazante de esos años, antes que el exilio.

Al volver, en 1977, empezó a trabajar en la Vicaría de la Solidaridad y volcó su capacidad de abogado en función de la causa de los derechos humanos.

-¿No tiene eso el costo de ir quedándose un poco aislado? Se dice que hoy el tema le interesa sólo a los familiares de las víctimas y a sus abogados.

-No comparto eso. La gente puede tomar opciones políticas y quienes fueron a la mesa de diálogo de alguna manera hicieron eso. Es legítimo. Yo no las he tomado fuera del movimiento de derechos humanos. Soy militante de esa causa. Tengo el más profundo convencimiento de que a estas alturas del siglo, el tema de las violaciones a los derechos humanos le interesa a la comunidad internacional y soy partidaria acérrima de la jurisdicción universal.

-Pero ¿no le preocupa el aislamiento?

-No creo haber perdido amigos. Tal vez sí oportunidades políticas, pero no me interesan. Tal vez cargos, pero tampoco me importan.

-En lo humano, ¿no ha pagado costos duros?

-No, al revés. Por donde voy, en el metro, en la micro, en la peluquería, en la calle, debo recibir a 10 o 15 personas que se me acercan y expresan solidaridad. Algunos me dicen: "¿Le puedo dar un abrazo y un beso?". Sentir eso, ¡es una maravilla!

-¿Usted ha podido superar su drama y sentir que tiene otras posibilidades?

-Por cierto. Esto que ha ocurrido es un quiebre de mi historia vital irreparable y definitiva: cambiaron el curso de mi vida para siempre. Pero ser abogado de derechos humanos, para mí, no es un drama, al revés: siento que mi dignidad personal ha sido fortalecida por mi actitud. Eso me da mucha fuerza y me siento muy coherente. La coherencia y la integración han rodeado la vida de mi hijo y la mía, y eso siempre me hace feliz.

Cuenta que actualmente su pareja es el economista Manuel, "Maño", Riesco: "El es mi ‘compañero de vida’, como dicen en Centroamérica. Es una persona con quien comparto prácticamente la totalidad de las cosas que me ocurren. Tenemos en común una historia para atrás, compartíamos el mismo proyecto de vida. Y a ambos nos ocurrió lo mismo, pues él también es parte de una generación que fue ferozmente golpeada por la represión. Su íntimo amigo era Eugenio Ruiz Tagle, una de las víctimas de la "Caravana de la muerte" y él está muy contento de que yo haga todo esto…<B< b separadas?< casas en vivimos porque Sartre, y Beauvoir de Simone la como Somos años. 10 más relación una Tenemos eso. por quiere me que creo parte En> (se ríe).

La casa vacía

Por su experiencia como abogada de la Vicaría pudo, además, conocer antecedentes que le permitieron hacer un hallazgo macabro que le contó años más tarde al escritor Carlos Cerda y que éste incluyó con rasgos de ficción en su novela "Una casa vacía".

Los datos reales de esa historia fueron los siguientes: un amigo suyo, el entonces actor Marcial Edwards, arrendó y refaccionó una casa grande en Ñuñoa el año 78, donde se fue a vivir con su mujer, Lupe, y el pequeño hijo de ambos. Una fría noche de julio de ese año invitó a sus amigos más cercanos a inaugurarla. Les explicó que quedaba en la calle Irán y les dio el número. Hacia allá partió Carmen junto a Eugenio Ahumada, colega de la Vicaría. Al llegar al lugar, los recorrió un escalofrío. Estaba justo en la esquina con Los Plátanos, una dirección que ellos tenían fresca en la memoria, pues habían recogido múltiples testimonios de personas que sobrevivieron a torturas y que coincidían en señalar que allí funcionó un recinto clandestino de la Dina, conocido como "La venda sexy", pues en ese centro se especializaban en torturas sexuales a los detenidos, especialmente a las mujeres.

De los que pasaron por ese recinto sobrevivieron muy pocos, pero ellos detallaron luego muy rigurosamente las catacterísticas del lugar. Recordaban, por ejemplo, que había un sótano, que el baño del primer piso tenía un escalón y una ventana como ojo de buey. A la entrada, había una cortina de felpa verde, que muchos habían visto cuando se les corría la venda. Parecía indicar ser una casa grande ubicada cerca de un colegio. Al bajarse de su citroneta, Carmen y Eugenio observaron otra inquietante señal: la casa estaba rodeada por un cerco negro de latas y en la puerta tenía una mirilla, dato que también les sonaba conocido.

Antes de entrar, le pidieron a su amigo Marcial que saliera para comentarle el asunto. Le hicieron más preguntas y todos los datos coincidían con los testimonios de los torturados: había sótano, había ojo de buey, y también una cortina de felpa que la mujer de Marcial había sacado por encontrarla horrible.

En lugar de entrar al living a saludar a los invitados, partieron directo al sótano para chequear otros detalles y terminar de convencerse de dónde estaban.

Los tres quedaron muy impactados, pero no quisieron comentar el hecho. Al día siguiente hicieron consultas y el arrendador contó a Marcial que después del golpe su hermano -el verdadero propietario- partió exiliado a Alemania y él alquiló la casa a Carabineros. Después se desentendió y se limitó a recibir el cheque mensualmente.

Tras enterarse de la verdad, Marcial -que no estaba en condiciones de cambiarse de inmediato-, pidió a unos curas amigos que bendijeran el inmueble. Pese a ello, para Marcial todas las noches de ahí en adelante fueron de un horrible desvelo y debió esperar tres o cuatro semanas antes de poder mudarse.

"Tolerancia cero con Pinochet"

-¿Cree que el ministro Juan Guzmán vaya a llegar a puerto en su propósito de juzgar al general Pinochet?

-El ya ha llegado a varias caletas. Ha podido reconstruir una gran parte de la verdad de lo ocurrido en esos días con las 75 víctimas de la "Caravana de la muerte". Ha hecho un trabajo notable.

-¿Ha recibido presiones?

-Sí, por cierto que ha recibido presiones, tanto directas como indirectas. Una indirecta fue, por ejemplo, que los comandantes en jefe presionaran y le exigieran al Presidente de la República convocar al Cosena después de una resolución suya.

-¿Cree que el Presidente Lagos, para poder gobernar tranquilo, pueda ceder ante las presiones de las Fuerzas Armadas y de los empresarios que se niegan a invertir por el acoso al general Pinochet?

-Sería un grave error ceder a las presiones de los poderes fácticos, que están representados por aquellos dirigentes del empresariado que actúan más bien como activistas. Walter Riesco, al hacer las declaraciones que hace, es un activista y un agitador pinochetista, y así no puede representar bien los intereses del empresariado. Lo que él ha dicho es mentira: no es cierto que no inviertan por el tema de Pinochet. Los empresarios no invertirán mientras no recuperen la confianza en que la reactivación económica prosperará. Lo demás son patrañas.

-¿Qué significa para usted la estrategia del abogado Pablo Rodríguez de resistirse inicialmente a que Pinochet se someta a exámenes médicos y a una declaración indagatoria?

-Me parece grave. Esa posición de la defensa linda en lo ilegal. En el caso del abogado, obstruye la justicia, por lo que podría hacerse acreedor de sanciones disciplinarias. Y en el del inculpado, implica ponerse en un abierto desacato. Negarse a cumplir una resolución judicial es desacato en este país, cualquiera sea el ciudadano que lo haga.

-¿Estaría apostando a que la fuerza de los hechos hiciera tolerable por la sociedad ese desacato?

-Claro, es posible que esté apostando a que Pinochet reciba apoyos que le permitan mantener esta actitud, pero ése es un desafío a los tribunales de justicia y una burla que se hace al país. Nosotros pedimos tolerancia cero con Pinochet, porque no es posible que haya alguien que pretenda ponerse por sobre los demás.

-Según Rodríguez, el juez Guzmán tiene una obsesión por procesar a Pinochet, sin existir una sola prueba que lo vincule a él directamente.

-Decir eso es una barbaridad. Las pruebas que vinculan a Pinochet con la "Caravana", son tan contundentes, tan graves, múltiples y concordantes, que la propia Corte Suprema, en un fallo histórico, con más de 70 considerandos, establece una a una las presunciones fundadas de su participación como autor mediato, lo cual significa que dio las órdenes.

-¿Cómo califica la estrategia general seguida por el equipo jurídico de Pinochet?

-El problema es que ellos han tenido que ir cambiando estrategias, saltando de una cosa a otra, borrando con el codo lo que escribieron con la mano. Dijeron que el recurso de amparo al que acudieron sorprendentemente fue porque "Pinochet no ha sido oído, tiene que ser oído". La Corte le dijo: "OK, estimamos que no fue oído cuando respondió el exhorto, que sea oído". Entonces su defensa dijo: "No, no puede ser oído, está enfermo". La Corte respondió: "Bien, está enfermo, que le hagan exámenes médicos". Ahí la defensa respondió: "No, tampoco, no queremos exámenes médicos". En definitiva, el objetivo de la defensa, tanto en Londres como acá, ha sido que Pinochet rehúya la justicia. Eso es todo. Por eso sus estrategias procesales son todas dispares, erráticas. Y su otra estrategia global es movilizar a los poderes fácticos.

-Como sea, hasta ahora han conseguido el objetivo. Eso hace dudar que Pinochet sea procesado.

-Creo que va a ser sometido a proceso, porque es una resolución inevitable de acuerdo a los méritos de esta causa. Uno de sus abogados acaba de decir que él había estudiado y razonado la sugerencia de su defensa y había adoptado la decisión de no hacerse los exámenes médicos. Si él ha razonado, significa que no tiene ningún problema mental, porque las personas con problemas mentales no pueden razonar.

-En este proceso, al parecer, no está acreditada la participación directa de Pinochet. Lo que está acreditado es que él amplió las facultades de Arellano Stark para agilizar los procesos, nada más.

-No es así: lo que está acreditado es que Arellano actuó como oficial delegado del comandante en jefe del Ejército. De acuerdo al reglamento castrense, eso significa que él representa directamente al comandante en jefe y es un recurso extremo. Está acreditado que Pinochet conoció de las masacres de Antofagasta y Calama ordenadas por su oficial delegado, pues fue informado personalmente al día siguiente de ellas, el 20 de octubre del 73, en la base aérea de Cerro Moreno, por el general Joaquín Lagos.

-Pero eso no implica responsabilidad en la orden.

-Claro que implica responsabilidad: no estamos hablando de un club deportivo ni de una montonera, sino del Ejército de Chile, donde la verticalidad del mando es un pilar esencial y estamos hablando del oficial delegado. Está acreditado que el general Lagos no sólo le informó personalmente, sino que fue convocado a Santiago por el mismo comandante en jefe, el 30 de octubre, donde firmó un oficio secreto conductor en que hace una relación de los muertos por orden de Arellano. Esa noche recibe en su casa la visita de Morel Donoso, quien le lleva de vuelta el oficio, por instrucciones del comandante en jefe, tarjado de puño y letra de Pinochet y con enmiendas en los costados, en que le dice que se olvide del oficial delegado y que haga sólo un listado de las personas ejecutadas. Y está acreditado que a los pocos días Pinochet asciende a Arellano a general de división y lo nombra comandante en jefe de la II División del Ejército, la más importante del país, y designa director de la Escuela de Caballería a Arredondo, el segundo de abordo. Ese premio no puede significar sino que la misión se cumplió a cabalidad.

-¿Cómo se explica la línea de la defensa de Arellano Stark, quien exculpa tanto a Pinochet como a sí mismo?

-Las estrategias de ambos han sido similares, porque los alegatos de la defensa de Pinochet siempre han dicho que la responsabilidad exclusiva fue de Arellano y éste siempre ha dicho que es de Arredondo. O sea, tenemos a dos generales de la República, con altos cargos, que no son capaces de asumir la responsabilidad de lo que han hecho, sino que culpan al de abajo, al subordinado.

-¿No cree en la tesis de que haya habido "un golpe dentro de un golpe", como se ha dicho?

-La comitiva de Arellano tuvo dos objetivos. Primero, eliminar a las personas que se eliminó y aterrorizar a la población civil. Pero hubo una segunda motivación, dirigida hacia el corazón del Ejército, porque los métodos utilizados para la eliminación de las personas fueron brutales. Ellos no tuvieron ni siquiera el "privilegio" de ser fusilados, sino que fueron masacrados con corvos y con disparos en distintas partes del cuerpo. Y quienes sí lo supieron de inmediato fueron los militares y aquellos oficiales de cada regimiento local a quienes la comitiva de Arellano obligó a participar en las ejecuciones y a presenciarlas. El objetivo fue alinear al Ejército en torno a la política más cruel, más represiva. Ese elemento lo puso Arellano, pues en octubre del 73 era un general todopoderoso. Su disputa por el poder con Pinochet es muy posterior. Arellano llega a cada lugar -lo dicen todos los jefes militares-, pide una nómina de los presos, se la dan, él hace un tic con lápiz rojo y selecciona personas; esas listas las toman Arredondo, Morén Brito y Fernández Larios, y sacan a las personas para masacrarlas. Ellos intervienen el mando y llegan en trajes de combate, con corvos a la vista, con granadas, con subametralladoras, con una actitud intimidatoria, en un helicóptero. ¿Que Arellano viene a acelerar procesos? ¿Y dónde está el oficial letrado que lo acompaña? Además, viene con dos sicópatas, según sus propias palabras con las que ahora califica a Morén Brito y a Fernández Larios. O sea, la comitiva para acelerar procesos está integrada por dos sicópatas en trajes de combate y ningún oficial letrado.

"No es un informe verosímil"

-Usted siempre fue escéptica frente a la mesa de diálogo. ¿Qué piensa ahora sobre sus resultados?

-En lo que a mí respecta, me acaban de informar que Carlos, mi marido, está entre las personas que fueron lanzadas al mar. ¡Eso es un fraude y no lo voy a aceptar!

-¿Por qué duda de esa versión?

-Porque me parece muy sospechoso que, justamente ahora que se ha avanzado tanto en la investigación sobre la "Caravana de la muerte", todos los casos ahí contemplados aparezcan como lanzados al mar, cuando tenemos pruebas de que ellos fueron enterrados en una fosa clandestina en el camino a San Pedro de Atacama. -Pudieron ser sacados y lanzados al mar después. -Claro, pero en ese caso el informe debiera explicar las circunstancias completas y no algo tan escueto como decir: "Fulano de tal, lanzado al mar frente a Tocopilla; "fulano de tal, lanzado al mar….". Es una vergüenza, un escándalo, eso no es un informe serio ni verosímil. Presentado así, es una maniobra y una crueldad tremenda con los familiares. Además, la versión entregada muchas veces se contradice con los antecedentes que constan en los procesos. Se cita la fecha de muerte de algunos que, según testigos, fueron vistos días después. Eso sugiere que la información no es veraz, sino preparada.

Oscar Sepúlveda. Fotos: Adela Silva.